Las Cuevas de Baltzola - De una ida y un retorno

El Puente de los Gentiles

La mañana de Sábado comienza con una niebla consistente, dejamos el vehículo en una pequeña ermita que hay en el barrio de Indusi, comenzamos a caminar por la carretera hasta llegar a un pequeño puente, el cual gira hasta el caserío de Zamakona, donde comienza la ascensión a las cuevas, a partir de ahí, comienza la senda que nos llevará hasta la primera de las cuevas, es una senda pedregosa que asciende unos 300 metros y que pasa a través de "El Puente de los Gentiles", una vez pasas "El Puente de los Gentiles" hay una curva a la derecha, pero ese camino es para realizarlo sin internarte en las cuevas, lo que nos interesa, es una estrecha senda que serpenteando, se dirige hasta la entrada de la primera cueva.

Entrada a la Primera cueva

Para llegar a la primera de las cuevas por el sendero, como nos aventuramos a ir con un poco de niebla, el camino estaba un poco embarrado y resbaladizo, así que en algunos tramos del mismo, nos vimos en la obligación de utilizar la tracción total, teniéndo que ayudarnos a avanzar, en algunos tramos,  sujetándonos con las manos en algún pequeño saliente, aunque eso fué de manera muy puntual. Una vez llegamos a la primera de las cuevas,nos sorprende la entrada tan abierta que hay a la misma, en la entrada y debido al tiempo que teníamos, hay un paso algo difícil, pero nada que no se pueda superar un día de sol sin mayores dificultades, una vez superado el obstáculo, sacamos de nuestras mochilas las linternas y comenzamos a adentrarnos en la cueva, dentro de la misma, sorprende el amplio espacio que hay, pudiendo, una persona como yo de alrededor de 1,85cms estar de pie sin problemas, según entramos, la oscuridad comienza a envolverte mientras dejas atrás la luz de la entrada a la cueva, a mitad de cueva más o menos hay un tramo en la pared izquierda que se interna más en la misma, es la entrada para hacer espeleología, para no perdernos lo mejor es seguir la pared derecha, tras un poco andando con la linterna veréis la salida al final de la cueva.

Salida de la Primera cueva

Hay dos salidas de la cueva, nosotros nos decidimos por la de esta imagen, que parecía estar más en línea con nuestra ruta inicial para llegar a la segunda de las cuevas. Este según parece debe de ser un buen sitio para realizar otra actividad tan interesante como puede ser la escalada, ya que la piedra de la cueva es lo bastante irregular para poder crear circuitos de escalada, o eso pensarían los que nos encontramos a la salida de la misma.

Vista desde arriba de la salida de la cueva

Una vez nos encontramos fuera de la cueva, por la salida que cogímos nosotros, hay que realizar una pequeña bajada hasta encontrar la senda que sigue hacia la siguiente cueva..., pero bueno como suele decirse "una vez metidos en harina...." esta bajada, igual se podía evitar si se cogiese la otra salida de la cueva.. si se opta por esta salida y se va con animales de compañía, es probable que tengáis que ayudar a vuestro compañero canino a buscar el camino correcto para descender ya que no es muy claro.
Una vez hayáis salido al pequeño riachuelo que se encuentra un poco mas adelante, veréis la entrada de la siguiente cueva.

Entrada a la segunda cueva

Esta es una cueva que no tiene mayor complicación, lo que resulta curioso es pensar que en algún momento tanto esta cueva como la primera que habíamos dejado atrás eran una sola, en esta cueva un riachuelo de cantos rodados pasa a través de ella, corre una agradable brisa en la misma, y es un buen sitio para los que quieran puedan hacer un alto en el camino y refrescarse un poco mientras retoman energías...

cascada natural que se encuentra a la salida de la segunda cueva

Esta segunda cueva no es muy larga pero en todo el tramo de esta cueva el río a tomado todo el ancho de la misma así que es aconsejable ir con calzado adecuado ó ponerte una chanclas para pasar por este tramo el día que hace un sol de justicia... .


Cuando llegamos al final de esta cueva, ascendemos otro poco por el lateral de la cascada, para llegar a una campa ya cerca del final de nuestro recorrido para dar a parar en una hermosa extensión verde atravesada por un riachuelo serpenteante..

Es una pena, que cuando nosotros llegamos a ese punto del camino, la niebla no había desaparecido, sino que seguía insistiendo en quedarse de manera perpétua, en toda nuestra marcha por las cuevas y el bosque, por que no dejo de pensar que en un buen día, este es el sitio perfecto para relajarte, sacarte una toalla, ponerte a comer el bocadillo, relajarte, quitarte las botas y los calcetines y refrescarte en el riachuelo mientras disfrutas de un poco de sol y buena conversación con tus amigos ......
Una vez descansados y rela jados tenéis dos opciones, tomar el camino de vuelta al vehículo, ó continuar  por el camino hasta una ermita que hay más adelante, recordad que hasta la ermita serán no más de 3 kms de ida.... y se tiene el mismo más o menos de vuelta, pero esta vez sin meterse en las cuevas, el camino de vuelta es fácil no hay riesgo a perderse en total la caminata son 5.3 kms, ó podéis hacer como hicimos nosotros cuando llegamos hasta la ermita....

Nosotros nos encontramos rumbosos y decidimos hacer otra ruta, así de buenas a primeras y con la niebla que hacía decidimos subir a la cima del monte Garaio.....


Pero eso, como se suele decir, es otra historia....